jueves, 25 de julio de 2013

LA BRUXA: MARISOL HUERTA NIEMBRO


https://youtu.be/VCvU4cGvywk

Este precioso vídeo de animación de Pedro Solís García y producido por La Fiesta PC.by,  ha ganado varios premios y no me extraña por lo delicioso y lo bien trabajado que está. Es del año 2009.Se trata de mí. Sí, de vuestra profe Marisol Huerta Niembro. Pedro ha querido contaros cosas de lo que me pasó una primavera.
Aquel año yo me enamoré del amor y quería hacer una pócima para convertir en príncipe a una ranita que vivía en mi casa.Ella también quería porque le iba la marcha y estaba harta de ser tan bajita. Saqué un libro de magia donde se explicaba todo el proceso y los ingredientes necesarios para convertir ranas en príncipes.
Tenía casi todos pero me faltaba echar una hoja de un árbol que solo nacía en Cuenca. A por ella, me dije.
Y mi ranita y yo, después de varias dificultades, llegamos por fin allí. Llamé a Irene F y a Jaime(los dos de 6ºA pero que ya pasan a la ESO), porque sé que tienen  familia por allí, pero no los conocía nadie y tuve que apañármelas yo sola para encontrar la hoja mágica. La encontré al fin y volvimos a casa.
Cuando el hechizo estuvo terminado se lo eché por encima a la ranita y se convirtió en un chico que no me gustaba mucho, la verdad,(tonta que fui pues debí quedarme con ese). Y le eché más líquido sobre su cabezota para ver si mejoraba su aspecto. Y sííííííí, tanto mejoró(era como Shrek cuando se transformó en príncipe), que no me hizo ni caso y encima se marchó con un motero que le guiñó un ojo cuando pasaba por allí.
Me quedé compuesta y sin novio.Puf, ¿qué voy a hacer ahora?
Menos mal que me he hecho un amigo que vale mucho. Es un ratón que también vive en mi casa y yo sin haberme dado cuenta.
Juntos podemos sentirnos acompañados y nos pasamos las horas leyendo conjuros y haciendo pócimas que nunca surten efecto.Somos desastrosos.Y hasta ha aprendido a leer.
Y aunque las pócimas no nos salgan,  nos importa poco porque nos hemos hecho indispensables el uno para el otro y estamos casi felices.

Muchos MUUUAAACCCAAASSS!!!

martes, 23 de julio de 2013

PEQUEÑO, 15 días en agosto, subtitulado Francés



Una reflexión inocente de un niño cargada de bastantes razones.
Yo tampoco quiero hacerme mayor, puaf, puaf!Y encima  este delicioso vídeo sirve para repasar francés. ¿Quién da más por menos?
¿Qué tal ese bañito, chicos? Da igual en agua dulce que salada, el caso es refrescarse y disfrutar. ¿A que sí?
Yo aún por Madrid disfrutando de este calorcito rico, rico, puaf, puaf!
Pero ya llegará el viernes y:
Asturias, patria queridaa,
Asturias, de mis amoores...

Muchos MUUUAAACCCAAASSS!!!

sábado, 20 de julio de 2013

LA MERIENDA, ¿POR QUÉ SE DEBE MERENDAR?

Algunos de mis alumnos me preguntan cuando van a salir al recreo que si se pueden llevar la merienda.
-¿La merienda?, les digo. Si la merienda se come por las tardes.
-Bueno, pues el desayuno o el tentempié de media mañana. Como se llame, me contestan.
-Muy bien, veo que ya os lo habéis aprendido de tanto oírmelo.
Y es verdad, aquí os dejo de dónde procede la palabra merienda y su significado.

merienda
Es una «comida ligera que se ingiere a media tarde».

La palabra proviene del latín merenda, que para la mayor parte de los autores clásicos significaba lo mismo que hoy merienda para nosotros. Sin embargo, Plauto y Festo usaron merenda también como sinónimo de 'cena'.

Algunos etimólogos han afirmado, equivocadamente, que merenda había significado, en realidad, «almuerzo», con base en una supuesta relación etimológica con meridiem «mediodía» y en el hecho de que en algunas comarcas de España haya tenido, en cierta época, ese significado. En este error —señalado por Corominas— incurre Covarrubias en su Tesoro de la lengua castellana o española.
En resumen, merienda es la «comida ligera que se ingiere a media tarde».

Una de las claves para conseguir estar sano es distribuir los nutrientes que ingerimos en un día entre, 5 comidas: desayuno, tentempié, comida, merienda y cena.
La merienda no solo es para escolares, todos, adultos también, deberíamos comer algo a media tarde para que no transcurra tanto tiempo entre comida y cena. Eso dicen los nutricionistas y hay que hacerles caso. La merienda garantiza el mantenimiento de niveles constantes de glucosa en sangre y evita el consumo de las reservas propias de nuestro cuerpo. 

     

            
UMMMMM, qué hambre me está entrando!!!

Muchos MUUUAAACCCAAASSS!!!