En la playa de Vega (Asturias), este finde mi hija y una amiga tuvieron que salvar a una mamá pata y a sus diez patitos. La madre se había desorientado y llevó a sus hijitos al mar donde pronto morirían si no llegan dos chicas con buen corazón, que estaban pasando la mañana jugando a las palas, y lo vieron.
Cogieron a los patitos entre sus manos y los llevaron al río que desembocaba allí cerca. La mamá pata siguió a sus pequeños y la historia terminó bien porque pronto encontraron su lugar.
Gracias a Belén (mi hija), y a Enma (su amiga), las salvadoras de patos.
Os dejo la foto que me mandó mi hija y un poema que he escrito para esta ocasión.
MUUUAAACCCAAASSS!!!
LA PATA Y LOS PATITOS
La patita madre
tiene diez hijitos
y a todos los manda
ponerse en su sitio.
-Hijitos, patitos,
vámonos al sol,
que el agua nos libre
de la insolación.
Han llegado al mar,
y allí se han perdido,
el agua salada
les da mucho hipo.
El patito chico
que es un campeón
empieza su clase,
la de natación.
Empieza a toser
y casi se ahoga
ese agua salada
es para las focas.
Hip, patito uno,
hip, patito dos,
y así hipeando
los ocho más dos.
vámonos al río
que en el agua dulce
está nuestro nido.
Poema de Marisol Huerta Niembro